Dispositivos de autoservicio para la emisión de tarjetas de estudiante en Berlín
Impresión en dispositivos de autoservicio de varios miles de tarjetas de estudiante con múltiples funcionalidades.
El desafío: editar en dispositivos de autoservicio las tarjetas de estudiante con nuevas funcionalidades
En otoño de 2016, se inscribieron en las universidades de Berlín (Alemania) más de 180 000 estudiantes. Para liberar la carga de las oficinas de admisión, seis universidades acordaron en 2014 un proyecto común para implantar dispositivos de autoservicio para la emisión de tarjetas de estudiante.
Asimismo, las universidades querían ofrecer a los estudiantes nuevas funcionalidades a través del nuevo sistema electrónico. La campuscard se implantó en otoño de 2016 y ofrece funciones de control de acceso, tarjeta de biblioteca, monedero electrónico para el restaurante universitario y tarjeta de transporte.
La solución: la integración de 20 KM500B y 30 Tattoo RW en dispositivos de autoservicio
La sociedad PRO SERVICES GmbH, líder en Alemania en diseño de sistemas de gestión de tarjetas, fue la elección de las universidades para diseñar 20 dispositivos automáticos para la personalización y la impresión instantánea de tarjetas de estudiante multifunción. Para este proyecto tan ambicioso e innovador, PRO SERVICES optó por los sistemas de impresión de tarjetas KM500B de la sociedad francesa Evolis, comercializados en Alemania por la sociedad Pfister ID Systeme.
Estos módulos se han diseñado especialmente para la integración en dispositivo de autoservicio. Además, para la reinscripción en un nuevo semestre, se han desarrollado también 30 dispositivos de actualización de tarjetas. Permiten eliminar la fecha de caducidad de la tarjeta de estudiante e introducir una nueva fecha. Estos terminales integran el sistema Tattoo RW de Evolis, que utiliza la tecnología de reinscripción en tarjetas de plástico.
El resultado: ahorro de tiempo y flexibilidad para tarjetas de estudiante con múltiples funcionalidades
Cada tarjeta está codificada con un chip RFID sin contacto, que permite cifrar los datos personales para que no se puedan falsificar.
La tarjeta cuenta con un código de barras, el nombre del titular, el número de matrícula, el registro de la biblioteca y una foto de identidad opcional. Actualmente, los estudiantes pueden crear su propia tarjeta e imprimirla en cuestión de segundos, incluso cuando la oficina de admisiones está cerrada.
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